viernes, 4 de octubre de 2013

Noches de insomnio

Cinco horitas de sueño...algo muy frecuente desde que empecé con el tratamiento. Me tomo un orfidal todas las noches porque así me lo aconsejó el médico, pero hay días que ni así. Tengo que conformarme con cuatro o cinco horas de sueño. No pasa nada, lo intento un rato, y cuando veo que sólo estoy molestando a mi marido me voy al salón a leer, o ver algo en la tele, aunque poco hay tan temprano...y hoy he decidido escribir.

Hoy es sábado, el jueves por la tarde tuve mi segunda sesión de quimioterapia de la fuerte, como le llama mi médico. Y le llama de la fuerte para compararla con las doce anteriores que fueron semanales de taxol y herceptin y eran más leves en cuanto a efectos secundarios. Lo bueno es que de esta más chunga solo serán tres, así que me queda sólo una el próximo 24 de octubre, y se acabó, no veo el momento!

Como he aprendido en estos algo más de 6 meses de enfermedad, cada persona es un mundo, y no hay enfermedades, si no enfermos, y eso es una realidad. Así que no a todas nos tiene que sentar igual una quimio o la otra, tengo historias de todos los tipos y todos los colores, de chicas que no soportaron las 12 iniciales, que para mi fueron muy llevaderas, de gente que no nota nada ni con esta que es cada 21 días...así que no hay que pensar que todo nos va a pasar a nosotras. Hay que saber que pueden pasar unas cosas u otras para cuidarse, y en mi caso para estar preparada, a mi el factor sorpresa me sienta fatal...prefiero que me digan todo lo malo que podría pasar, y así al final a mi me parece que no ha sido para tanto. Así soy con todo en mi vida...

Pues bien, en las doce quimios que me dieron para tratar de reducir el tumor, tuve cansancio sobre todo, un para de días los recuerdo especialmente agotada como si tuviera la tensión baja, pero poco más. Lo que sí me dio es como una alergia y me llené de granitos como si estuviera en plena pubertad. Me dieron algunas cremas en el hospital y amigas farmacéuticas me recomendaron cremas naturales, de aloe vera...un poco de todo, lo cierto es que no se me quitó con nada. El médico me dijo que me había dado mucha toxicidad y que poco se podía hacer...darme pastillas de dexometasona que no me quitó los granitos pero si hizo que me hinchara como una pelota. Comencé el tratamiento con 62 kilos(yo ahí ya pensaba que me sobraban 4, jejeje), y he llegado a pesar 72...ufff que mal he llevado eso. Ahora estoy en 68....a ver si no va la cosa a más que luego hay que perderlos. 

Además de esto, con esas 12 sesiones semanales me dio un par de semanas tos y yagas en la garganta, de hecho la tercera no pudieron dármela hasta que no estuviese mejor. El médico me dijo que  me recuperase e hiciera enjuagues con Mycostatin, y me puse mejor. Y por supuesto, el pelo!la gran temida caída de pelo! El oncólogo me advirtió  que con esta no se caía del todo, que era como una alopecia lenta pero que lo iría notando poco a poco. Yo lo noté a lo bestia justo 20 días después de la primera sesión. Empecé el 11 de abril, y el 1 de mayo se me caía el pelo a mechones...experiencia bastante desagradable que me hubiese gustado pasar con la cabeza rapada...pero no pudo ser, ya os contaré como lleve este día y lo demás, que os adelanto que para mí no ha sido nada traumático. 

En esta segunda etapa de quimios, la mala, como le decimos el médico y yo, posterior a la operación, y que sólo serán 3, las cosas están siendo diferentes. Por un lado es mejor, porque ya me han confirmado el cirujano y el oncólogo que después de analizar toooooodo lo que me quitaron, (que fue mucho lo que se quedó en aquella sexta planta...) ESTOY CURADA! La verdad es que oír eso es un alivio enorme, tanto que no te lo puedes ni creer...pero por otro, estas dan unos efectos secundarios más fuertes...por lo menos a mí.

En la primera llegué a casa con fatiga, traté de comer poquito, tapitas, como me dijo el médico cada dos o tres horas, y esa misma tarde vomité...a eso le siguieron 4 días de asco y fatiga que me costaba hasta beber, lo que hizo que me encontrase bastante débil, pero vamos, en una semanita estaba ya repuesta, con hambre, y tomando huevos fritos con patatas que me encantan...si, soy así de bestia. El oncólogo me dice que el día que tenga hambre tome lo que me apetezca, lo que más me guste...y yo, en eso, también le hago caso.

Esta vez, antes de ayer, me han dado medicación para las náuseas y vómitos porque les he contado mi mala experiencia de la primera vez, así que tengo tres días de unas pastillas antes y después del desayuno...pero lo cierto es que hasta el momento no ha habido mucho cambio. Vomité el primer día,y aquí estoy de madrugada con mis náuseas...a ver si duran menos días que la otra vez...

En cuanto al pelo, que de los dos meses de verano sin quimio ya lo tenía bastante larguito, vamos, como un soldado, pero toda la cabeza llena de pelo, ahora está otra vez muy pobre. Me he rapado pronto para que no me pase lo de la otra vez, pero no se ha caído aún del todo. Ya os diré cuanto tarda esta vez.

Poco más que contar, que me gustaría dormir más, pero que esto es lo que hay, luego caerá una buena siestecilla. Y que estoy bien, con ganas de que llegue la siguiente y terminar otra etapa.

Un placer poder compartir todo esto! Adios!



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